Apocalipsis Zombie Hoy

A esto me recuerdan los "zombiabrazos" y demás... a los briconsejos.

¿Qué pasa familia? Aquí estoy, liquidando un par de zombies que me he encontrado.
*Musiquilla irritante*
Para acabar con los zombies de hoy necesitaremos un par de cosillas que todo el mundo tiene en su garaje:
-Una pistola de clavos.
-Un soplete de acetileno.
-Una ampolla de nitrógeno líquido.
-Dos ballestas de madera de tejo con cuerda de tripa de cerdo.
-Un carcaj de flechas de punta de plomo y madera de arce.
-Una sierra radial de medida siete con dientes tipo nueve y un mango de polietileno tereftalato.
-Una máscara de soldador de kevlar.
-Seis tornillos de cabeza de estrella.
-Nueve clavos de wolframio.

Ahora que tenemos todos los materiales, vamos con el briconsejo de hoy.

*Aparece un tío con coleta untando macetas en mierda de ardilla siberiana*

Aquí estamos otra vez, y ya hemos usado todos los materiales y tenemos dos bonitas mesas de centro hechas con los cadáveres de los zombies.

Un saludo y nos vemos en el próximo "Bricozombía".

*Off-tema: si tenemos que decorar el refugio, tendremos que contar con Claxors como decorador - montador de muebles -carpizombitero!! Les tendré que poner sinfonía también a los post, pero sin duda la canción de bricomanía no!
Gracias por vuestros comentarios, chicos ^^ Y seguimos con los zombiconsejos!

Zombiconsejo nº 3. El mejor refugio posible en el mejor de los mundos posibles.

Hola Zombipupilos,

Después de varias peripecias varias, como tener que recuperar la contraseña porque la he olvidado y no estoy en casa (cosas de rubias), después de pasar toda la tarde terminando un discurso de acusación a Caperucita Roja (hay que estar preparados, quizás cuando la humanidad se recupere del Despertar Zombie decida juzgar a los genocidas que descabezaron zombitos y tengamos que defendernos), por fin, puedo continuar con nuestro Zombiconsejo nº3: el refugio.

En episodios anteriores, reflexionábamos sobre la necesidad de estar preparados (Zombiconsejo nº1) y de tener preparado una buena provisión de viandas, teniendo en cuenta siempre su preparación, caducidad, etc. (Zombiconsejo nº2). Sin embargo, todo esto nos será de poca utilidad si no tenemos un buen lugar donde refugiarnos.

Todos tendemos a pensar que nuestro hogar, dulce hogar, es una fortaleza impenetrable, segura y protegida, donde podríamos sobrevivir a cualquier cosa (de hecho, todo el mundo sabe que el mejor método de protección contra los monstruos son las sábanas). Pero en un mundo donde la inmensa mayoría de sus habitantes busca desesperadamente cosas vivas que comerse, hay que tener mucho cuidado con dónde sobrevivimos.

Cuando una persona muere y se convierte en zombie, una cosa está clara: ha muerto. Vixit (ha vivido), como decían los romanos. A partir de ese momento, se convierte en un desesperado corredor, un comevivos, un monstruo sediento de sangre que busca saciarse con nosotros. Sin embargo, el hecho de que haya muerto supone que todos sus sistemas han colapsado, incluido el inmunológico. Y la consecuencia lógica de esto es que, con el paso del tiempo, las bacterias comenzarán a comerse su cuerpo y los zombies se desmoronarán poco a poco hasta convertirse en malolientes montones de cosas muertas.

Todo este proceso llevará tiempo, sobre todo porque habrá que esperar hasta que todo el mundo sea infectado para que los cuerpos se empiecen a pudrir, por lo que hay que buscar un refugio seguro donde permanecer a salvo.

En general, existen altas probabilidades de que las ciudades se conviertan en hormigueros zombies masivos, por la gran aglomeración de personas que hay hoy en día en las urbes. Seremos muy cosmopolitas, pero vivimos en masa y moriremos en masa si no hacemos algo por evitarlo.

En los primeros días caóticos, será prácticamente imposible salir o entrar en las ciudades, por lo que lo más seguro será encerrarse en el piso a cal y canto con bien de comida y agua, desinfectantes para que el baño no apeste mucho, y mucha paciencia.
Es recomendable bajar las persianas para que de noche no se vea luz (ya hablaremos sobre el tema de la iluminación más adelante), aunque la supervivencia psicológica dicta que se mantengan algunas abiertas para que los ánimos no decaigan. Vivir en completa oscuridad, al final, pasa factura.

En todo caso, tendremos fundamentalmente dos opciones:

- Piso en la ciudad: lo recomendable sería que se tratara de un piso alto, donde no pudiera escalar nadie. La mayoría de casas tienen las puertas blindadas pero, por si acaso, no vendría mal poner un mueble ancho y pesado contra la puerta de entrada, que suele ser una. Téngase especial cuidado con la luz por la noche para no llamar la atención de los zombies ni de visitantes indeseados (posiblemente, a los muertos que nos quieren comer se sumen los malnacidos que aprovechan la desgracia para matar, asesinar y violar, saciando unos instintos tan bajos como los de los comecerebros). Pasad hambre. Daos ánimo, o si estás solo, escribe para la posteridad, lee o duerme. Come poco y procura sobrevivir. Pasado el primer mes las cosas irán poniéndose más fácil, y ya hablaremos entonces de pensar en salir a buscar un lugar donde vivir. Por ahora nos preocupa solamente la supervivencia. El resto ya vendrá después.

- Chalet en ciudad: todo lo anterior es aplicable, aunque ampliándose muchísimo la cuestión de la seguridad. Un chalet tiene ventanas en la planta baja, la puerta principal, la puerta trasera del jardín y la puerta del garaje, por lo que la entrada de zombies o delincuentes es mucho más sencilla. Conviene tapiar desde dentro y/o fuera las ventanas de la planta baja, tanto para proteger como para evitar la salida de luz, y vivir de puertas hacia adentro. Hay que pensar siempre en tener una vía de escape (aquí es más sencillo, intentar, por ejemplo, escapar de un cuarto piso con zombies poblando las escaleras es prácticamente imposible, a no ser que tengas una escala para bajar por la ventana...), for if the flies. Si tienes jardín, piensa en comprar semillas de comida y cosas para la tierra (abonos - puedes reaprovechar tus propios desechos, fertilizantes, etc.), de donde podrás alimentarte de forma un poco más sana. Pero sobre todo deberás rezar para que llueva. No malgastes agua.

- Casa en un pueblo: sin duda, este sería el refugio zombie más seguro y preferible. Al estar situado en zonas rurales de poca población, el número de zombies será más reducido. Es factible que puedan aparecer algunas hordas aisladas, pero si se aprende a vivir en silencio y a pasar desapercibido es posible que ni siquiera reparen en nuestra presencia. Sería lo ideal una casa con muros altos y un jardín interior, donde intentar reproducir cultivos y poder secar algo de carne fresca, si se tiene. Todas las cuestiones anteriores sobre la comida son igualmente válidas, aunque tiene un punto a su favor que no se suele tener en la ciudad. Muchas veces, las casas de pueblo funcionan con depósitos de gasoil, por lo que se puede llegar a tener agua caliente; o incluso electricidad, si se tienen generadores o un manitas en casa que pueda apañar una instalación. Sin embargo y como antes, hay que tener mucho cuidado, porque en un mundo casi muerto, un equipo de música llamaría la atención como un faro en medio de la noche.

En general, estas son las primeras pinceladas sobre cómo podría ser el mejor refugio para la supervivencia en un Apocalipsis Zombie. Más adelante reflexionaremos más a fondo sobre ello, dibujaremos planos, bosquejos e ideas sobre cómo acondicionar una casa ya existente, ventajas e inconvenientes de permanecer en la ciudad, cómo salir de esta en caso de necesidad y otras muchas cosas que serán fundamentales el Día en el que Los Muertos Se Alcen de su Tumba.

Un zombiabrazo,

Survivor!

Esta muy interesante! Espero con ganas el proximo briconsejo zombiconsejo

#Superviviente 1 - Survivor.
Hola zombiamigos,

sé que os debo una entrada, pues el jueves no hablamos de refugios, ni de armas ni de comida ni nada, por eso os voy a compensar. Se trata de una leve reestructuración, un nuevo añadido del que espero que disfrutéis como yo mientras os lo regalo. Seguiré con mis consejos, mis reflexiones, con las aportaciones que hagáis y con las ideas que se nos vayan ocurriendo, pero también ilustraré con ejemplos lo que podría suceder, las opciones que tendríamos y lo que, sobre todo, deberemos evitar.
Así, sin fecha fija ni plan previo, os agasajaré con historias de supervivientes con las que ilustraré los zombiconsejos que os voy dando. Y sin más, así empieza la primera, #Superviviente 1 - Survivor!

Zombiabrazos, mis queridos Zpupilos.





"Abrió los ojos sobresaltada. La habitación seguía a oscuras, aunque una débil luminosidad comenzaba a filtrarse por entre los huecos de la persiana. Parecía que faltaba poco para el amanecer. Se mantuvo en silencio, sin mover un solo músculo, escuchando. No sabía si se había tratado de una pesadilla o si el ruido que la había despertado era real.

Su corazón latía desbocado. Si había sido de verdad, tendría que permanecer allí durante quién sabía cuánto tiempo, y no había previsto tal situación. Apenas le quedaba comida y ya no tenía agua. La idea había sido pasar la noche en aquel edificio y después seguir su camino, sin detenerse demasiado tiempo.

Cuando su corazón comenzó a calmarse, a volver a un ritmo normal, salió del saco y comenzó a doblarlo aún a oscuras. Cada vez había más luz, parecía que iba a ser una mañana soleada. Y aunque podía ser peligroso, al menos haría algo de calor y estaría más animada. El sol y la luz siempre la habían hecho sonreír y tener esperanza, antes incluso de que el mundo cambiase por completo. Ahora eran un recuerdo de que la vida había sido mejor y de que, tal vez, en un futuro, las cosas empezaran a arreglarse.

Tras guardar el saco en la mochila, recolocó las cosas y comió media barrita energética sentada en el suelo. Tenía que encontrar agua cuanto antes, a poder ser embotellada y con certeza de que fuese potable. Había estado tres días encerrada en un cuarto piso, vomitando y perdiendo líquido en cantidades preocupantes, y casi no había logrado sobrevivir a la deshidratación. Tan solo el providencial descubrimiento en el piso de al lado de un par de garrafas de agua cerradas y unos paquetes de suero en polvo la habían salvado de una muerte segura. Y habría sido absurdo, sobrevivir al apocalipsis zombie para morir deshidratada (como ir a la guerra, que gane tu bando y morirte a la vuelta por la infección en un dedo por arrancarte un padrastro, imbécil).

Esa había sido su gota de suerte para el resto del mes, y no estaba dispuesta a malgastar lo que pudiera quedarle por haber sido imprudente o no haber pensado en las consecuencias. Mientras terminaba de disfrutar de los trocitos de chocolate blanco de su barrita, trazaba un plano mental del camino que debía seguir. Primero, tendría que observar con cuidado de no ser vista la calle frente a aquel edificio para tener localizados a los zombies que pudieran estar presentes. Después tendría que retirar los muebles de la entrada y deslizarse hasta el portal, donde esperaría en las sombras hasta que pudiera salir con seguridad. Entonces, saldría a la calle, recorrería rápidamente lo que la separaba del siguiente cruce y entraría en el supermercado que había asegurado el día anterior.

Seguía religiosamente las normas que había establecido cuando el mundo comenzó a irse a la mierda. Sé realista. Sé cuidadoso. Sé rápido. Sé invisible. Hasta ahora habían funcionado, y las retocaría lo necesario para seguir sobreviviendo todo el tiempo que hiciera falta. Así que había llegado el momento. Necesitaba agua y comida con urgencia para rellenar la despensa de su refugio. El invierno se recrudecía con el paso de los días, y su intención era encerrarse durante todo el tiempo que pudiera sin llamar la atención de supervivientes ni zombies. Y después, iría en su busca.

Pero todo en su momento. Lo primero, la vigilancia. Cerró la cremallera de su mochila, la sujetó con firmeza a su espalda y cogió la barra de metal. Era hora de irse".

Me parece buena idea eso de llevar a la "practica" los consejos.

Muchas gracias, Grinko

El Jueves volveremos con más zombiconsejos. Si tú o alguno de los demás foreros que adoran los zombis quieren escribir un relatito breve sobre supervivencia, algo que les inspiren los zombiconsejos, o alguna cosilla en línea del relato de #superviviente1, me lo pueden mandar por privado o ponerlo aquí o por email y lo publicaré también en mi blog. ¡Se admiten participaciones!

Zombiabrazos para todos!

A ver, Survivor, no me seas.... si quieres relatos, ponte en contacto con los autores de los ya publicados en el foro, o invita a que sigan haciéndolo donde corresponde. Eso de recomendar tu hilo como tablón donde la gente cuelgue sus relatos me lleva a pensar que no te has parado a mirar el funcionamiento del foro.

Siento que se me haya entendido mal. No estoy pidiendo relatos en este post, creo que me he expresado mal. Estoy invitando a todo el mundo que quiera a participar en el blog. De hecho, si me mandan algo que ya esté en el foro, o me dan el enlace del relato, o me lo mandan por privado, me parecerá igual de bien y lo pondré en el blog si quieren.

Sí me he leído las reglas del foro, antes de empezar a postear ni nada. Aún así, lamento la confusión. No volverá a ocurrir.

No hay problema. Te pido disculpas entonces, pero tu mensaje parecía decir otra cosa. Adelante con tu relato!

Oki, para eso estamos, para aprender Ya edité el mensaje, y creo que ahora quedará más claro así. Y te animo a ti también a que participes en el blog! Eso hace siempre más rica la lectura y el contenido y todo ^^

Survivor! escribió:Oki, para eso estamos, para aprender Ya edité el mensaje, y creo que ahora quedará más claro así. Y te animo a ti también a que participes en el blog! Eso hace siempre más rica la lectura y el contenido y todo ^^

Ponte en contacto con azazel, es una maquina escribiendo y lleva bastante tiempo con el mismo relato.

Estimados zombipupilos,

os cuelgo la reflexión del jueves anterior, un poco ligera, y a continuación la promesa cumplida

Jueves 17 de mayo

hoy quería ponerme un poco seria y hablar de la psicología del ser humano, de preguntas que el hombre se ha planteado desde que el mundo es mundo, de cosas que me ponen triste y, al mismo tiempo, me dan ganas de quemar cosas.

Sin embargo, las nubes negras se han desplazado de mi horizonte, por lo que dejaré este tema para más adelante, como tenía previsto.

Hasta hoy hemos repasado zombiconsejos sobre la alimentación y el refugio, así como la recomendación de ser precavido y cuidadoso (mujer precavida vale por dos), pero todo muy como por encima. Os he comenzado a contar también la historia de #superviviente1-Survivor, que poco a poco irá mostrándoos cómo llevar a cabo lo que os voy recomendando, y dentro de poco, en un futuro no lejano, os iré presentando a otros #supervivientes. Unos cumplirán las normas; otros, no. Unos pasarán tiempo con nosotros; otros, no.

Pero antes de seguir creo que debo aclarar una cosa que Anónimo me ha hecho ver y que, quizás, con todo esto de los zombiconsejos, no ha quedado claro.

De momento, la situación de la que estamos partiendo para los zombiconsejos, amigos, es PREVIA A LA PANDEMIA. Todavía el caos no se ha extendido y quizás nunca se extienda. Pero hay que estar preparados. Nunca se sabe cuándo se puede liberar un virus, cuándo pueden levantarse los muertos de sus tumbas o cuándo convertir un chip a los hombres en tecnozombis.

En esta situación debéis ambientar los zombiconsejos nº, 1, 2 y 3. Son cosas que se deben tener en cuenta ANTES de que lleguen los zombis. Cuando agotemos todas las posibilidades que existen antes de que se despierten, pasaremos a los zombiconsejos extremos: qué hacer cuando los zombis llaman a tu puerta.

Se siguen admitiendo sugerencias y zombiconsejos por vuestra parte, queridos amigos. Y como este zombiconsejo es un poco extraño, en compensación os prometo algo especial el lunes. Algo relacionado con los refugios. Un zombiabrazo,

Survivor!


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21 de mayo de 2012

El refugio perfecto

ATENCIÓN: esta casa no es una casa real. Está basada en varios modelos reales, pero sería la combinación perfecta de todos ellos.


Hola zombipupilos,

hoy vengo a presentaros algo que he diseñado con mucho amor. Tengo el orgullo de presentaros lo que para mí sería EL REFUGIO PERFECTO:





Lo primero de todo he de decir que esta vez lo he dibujado a mano. Quizás en el futuro tengáis la maravillosa oportunidad de ver una de mis paintadas, pero de momento les ahorraré a vuestros ojos tal sufrimiento.
Antes de ponerme a divagar, os explicaré un poco el plano del refugio para que lo entendáis mejor. Se trata de una casa de dos pisos con patio interior. El dibujo superior es la planta baja; el de abajo a la izquierda, la fachada frontal de la casa y el de abajo a la derecha, la segunda planta.
En la planta baja, la parte de la izquierda es un huerto con una puerta de madera gruesa (marcada en rojo) y con una puerta al final que da entrada a la casa, a la cocina. En la parte de edificio, hay una puerta también de madera (puerta de entrada, marcada en rojo), un pasillo que conduce a la cocina y una habitación a la que se puede acceder desde el pasillo y el baño, que comunica también con la cocina.
A la derecha (según se entra) de la puerta de entrada, hay una escalera que conduce al primer piso. No es un piso completo, sino que hay una parte abalconada que da a la planta baja. Al salir de la escalera hay un amplio espacio al final del cual hay dos puertas, una que conduce a otra habitación, y otra al baño.
Las marcas de colores indican puertas y ventanas. Las marcas continuas indican peligro y / o apertura a la calle; las marcas ralladas indican apertura al interior o no peligro.
Del resto de la leyenda, los puntos azul oscuro son tomas de agua y la cruz azul, la llave del agua, que está en la acera justo al salir de la puerta de madera.
A la izquierda de la casa están adosadas dos casas más: una en ruinas e inhabitada, y otra más alta, cuyo único espacio abierto al huerto está separado por una valla (no se puede acceder, es parte del tejado). A la derecha, hay un camino; solamente dos ventanas dan al camino (de esto hablaremos más adelante). A la derecha de la casa (me olvidé de dibujarlo), el trozo qeu corresponde al salón está ocupado por un jardincito vallado, por lo que hay cierto elemento de defensa.

Los números del mapa corresponden a:
1. Huerto (con toma de agua y puerta peligrosa a la calle).
2. Almacén (con depósito de gasoil y materiales de obra, cajas de herramientas, hacha de cortar leña y cosas de jardín).
3. Cocina (con toma de agua, vitrocerámica, frigorífico...; ventanuco pequeño).
4. Habitación.
5. Baño (ventanuco pequeño).
6. Chimenea.
7. Baño (ventanuco pequeño).
8. Habitación.

En mi humilde opinión, este sería un refugio perfecto para sobrevivir a un apocalipsis zombie.

La primera virtud que tiene es su ubicación. Se trata de una casa situada en un pequeño pueblo de provincias de menos de 200 habitantes. El pueblo está en medio de un valle fértil, con un río cercano; por él pasa solamente una carretera comarcal de poco tránsito. Esto supone que, al haber pocos habitantes, el contagio será tardo y escaso. La mayoría son gente muy mayor o muy joven (según el censo de 2011), por lo que sería fácil hacerse fuerte y, con el tiempo, limpiar el pueblo de zombis.

La segunda gran virtud de esta casa - refugio es que es una casa orientada hacia adentro. Siguiendo un modelo similar al de las villas romanas, es una casa orientada hacia adentro. Al tener el patio interior y separado de la calle por un muro de tres metros con puerta de madera (que tapiaremos correctamente), si se aprende a vivir en silencio o con el menor ruido posible, se puede sobrevivir de forma bastante adecuada.
Habría que recordar aquí la cuestión de los alimentos y qué hay que comprar para sobrevivir mejor. Sin embargo, y aquí entran varias ventajas más de (sobre)vivir en un pueblo pequeño, el hecho de depender de gasoil hace de la casa un ente autónomo que permite tener gas para cocinar. Y eso amplía el espectro de alimentos a pasta, arroz, etc. Otra cuestión maravillosa de vivir en un pueblo en una región donde hace frío es que se puede tener carne puesta a curar. Todos esos filetes que se pudrirían en un congelador sin luz tienen la opción de ponerse a secar y/o curar para posterior consumición.

Como decíamos, ya de normal esta casa funciona con un depósito grande de gasoil. Habría que tener cuidado con la reserva, que se podría rellenar de restos de las casas vecinas si hiciera falta. En el almacén convendría tener guardadas algunas pequeñas bombonas por si acaso.
El hecho de que el agua corriente dependa del depósito del pueblo hace que sea relativamente fácil rellenarlo (si estamos en un lugar poco transitado por zombis o con sumo cuidado en su defecto) y tener cerca agua corriente. Habrá que tener, en cualquier caso, pastillas potabilizadoras (de lo que hablaremos en posteriores entradas, queridos).

Quizás una de las ventajas más importantes (ojo: acumular semillas y plantines de forma previa) sea la existencia del jardín interior (y no abierto a la calle, como los chalets, que es un punto de entrada MUY PELIGROSO), que permite cultivar alimentos frescos y disfrutar del aire libre, que da también ánimo y salubridad.

Precauciones sobre este refugio:

1. Peligro principal: puerta del huerto. Al tratarse de una puerta antigua, hay rendijas y no es demasiado fuerte. Convendría cubrirla con tablones y/o tapiarla con cemento o ladrillos. Una vez solventado este problema, dado que los zombis no saben trepar, la casa será prácticamente infranqueable.

2. Puerta de entrada. Del mismo modo que la anterior, convendría asegurarla de forma eficiente, teniendo en cuenta, sin embargo, que por algún sitio habrá que salir en caso de necesidad. Podría dejarse como alternativa una ventana, que son bajas.

3. Ventanas: las ventanas de la planta baja, así como las de la planta alta que den a la calle tendrán que estar permanentemente cerradas y tapadas con telas para que no dejen salir la luz y, en la medida de lo posible, el ruido. Las ventanas que den al jardín podrán dejarse abiertas (y es muy recomendable) por el empujón psicológico y anímico que representa vivir en un lugar con luz. Conviene no usar velas de noche para no llamar la atención, habrá que acostumbrarse a vivir con la luz del sol.

4. Otras cuestiones recomendables sobre seguridad. Habrá que estar preparados también para una posible invasión en la casa. Convendría pensar en posibilidades para frenar el avance, por ejemplo, en el pasillo (que es estrecho y con escalones), o tirar la escalera para que no suban a la planta alta (después habría que buscar un modo de bajar al huerto y seguir sobreviviendo.

5. Frío. Al estar en una región fría, el invierno es gélido y en esta casa hecha de piedra, más todavía. Se podría usar el gasoil para calefacción, aunque es recomendable ahorrar lo posible. Mantas y nórdicos pueden aliviar la sensación de frío, sacos térmicos, etc.


Y por todo esto, y muchas más cosas, como los recuerdos que me trae esta casita, considero que es el refugio perfecto al que intentaría marcharme en cuanto tuviera ocasión. Y hasta aquí nuestro zombiconsejo de hoy, queridos amigos. Pronto hablaremos sobre muchas más cosas y completaremos más temas (sanidad, comida, bebida, psicología del superviviente...). Pero todo con un único objetivo:


Zombiabrazos para todos,

Survivor!

Muy interesante el plano de la casa, yo de pequeño tambien hacia planos de refugios y fortalezas

Espero con ganas el siguiente capitulo.

Gracias por tu opinión ^^ a ver si el jueves le meto caña y ponemos algo interesante!

Sorpresa poética

Hola zombipupilos,

hoy os traigo una sorpresa fuera de días Z. Trasteando por el foro Somos Leyenda en estos días, leí la propuesta de escribir en verso y se me ocurrió este detallito. Espero que os guste.

Survivor!


Silencioso cual halcón
en la noche misteriosa,
caminaba cual ratón
buscando solo una cosa.

Dejando la luna a su espalda,
buscaba una lucecita,
algo que le revelara
dónde quedaba vida.

Arrastraba ya cansado
su cuerpo por los arrabales,
pesaroso y agotado
por todos aquellos mil males.

Mas al fin encontró aquella luz,
guiado por pasos inciertos
y tras darse un goloso banquete
los dejó desmembrados y muertos.


El Zombi

Survivor! escribió:Sorpresa poética

Hola zombipupilos,

hoy os traigo una sorpresa fuera de días Z. Trasteando por el foro Somos Leyenda en estos días, leí la propuesta de escribir en verso y se me ocurrió este detallito. Espero que os guste.

Survivor!


Silencioso cual halcón
en la noche misteriosa,
caminaba cual ratón
buscando solo una cosa.

Dejando la luna a su espalda,
buscaba una lucecita,
algo que le revelara
dónde quedaba vida.

Arrastraba ya cansado
su cuerpo por los arrabales,
pesaroso y agotado
por todos aquellos mil males.

Mas al fin encontró aquella luz,
guiado por pasos inciertos
y tras darse un goloso banquete
los dejó desmembrados y muertos.


El Zombi

La primera vez que leo un poema sobre un zombi

Esta muy bien.

Si la verdad que esta muy bien .

Para cuando el proximo zombiconsejo?

Gracias, chicos La verdad es que era una bobadita ^^

El próximo consejo llegará el lunes Hay una encuesta en mi blog para decidir tema, y de momento van ganando las armas poco convencionales, así que tendré que ir pensando en prepararos también armamentísticamente

Me gusta la idea, ya tocaban las armas

Gracias por vuestras opiniones, chicos. Aquí va el tema de las armas, aunque os advierto de que son armas "poco convencionales"




Hola zombipupilos!

Gracias a todos los que habéis participado en la encuesta temática. Como habréis podido comprobar, ha ganado el tema de las "armas poco convencionales", así que el zombiconsejo de hoy va por vosotros

La idea originaria de este blog vino, precisamente, por el tema de las armas. Estamos acostumbrados, en general, a ver películas y series de zombis ambientadas en Estados Unidos. Y eso permite que sus supervivientes tengan cerca lugares donde obtener fácilmente armas o que, incluso, las tengan en su propio domicilio. En The Walking Dead, por ejemplo, los dos protagonistas son policías, ergo tienen su arma reglamentaria y las que, además, sacan de la comisaría. Otro de los protagonistas tiene armas de caza, e incluso una de las chicas lleva una pistola regalo de su padre para poder protegerse (regalo previo a los zombis).

Que los protagonistas de una película como Zombieland se encuentren, abandonada en un hammer, una amplia bolsa de deportes llena de armas de distintos calibres y tipos con muchísimas balas es algo que solamente puede darse en los Estados Juntitos. Por no dar muchos más ejemplos de otras pelis o libros.

Pero para bien o para mal, nosotros estamos en España (Essshpiña; aquellos lectores, si los hubiera, que vivan en otros países habrán de trasladar todo esto a su lugar de residencia, como ya he dicho en alguna ocasión) y en España habremos de sobrevivir.

Y sin embargo, todavía hay cosas que me rechinan cuando leo libros de zombis (porque series no hay - todavía - y creo que las películas prefiero no verlas) ambientados en este nuestro país. Por ejemplo, y sin destriparos mucho la trama, empecemos por los libros de Manel Loureiro, Apocalipsis Z. El protagonista de estas novelas es un abogado que vive en una urbanización fuera de "una pequeña ciudad española de provincias". Dado que está cerca del mar y parece que tiene un nivel de vida medio-alto, es creíble que tenga un barco para ir a hacer submarinismo y pesca en las rías gallegas y en el Atlántico. Aceptamos, también, que tenga un lanzaarpones para pescar. Vaaaale. Pero ¿cuánta gente tiene de eso en su casa? ¿Tienes un arma como esa en tu posesión, silenciosa y eficiente, para defenderte de los zombis? Yo no. Y supongo que la mayoría tampoco. Primer punto que habrá que solucionar. Más adelante en los libros terminan todos por conseguir armas varias, pero en eso no me voy a meter todavía porque recordad que estamos en las fases previas al Apocalipsis Zombie!

En los libros de Carlos Sisí, Los Caminantes, varios protagonistas van sobreviviendo sin armas, pero la mayoría de esos grupos son diezmados al principio. Solo el gran grupo de supervivientes de Carranque consiguen aguantar durante un tiempo, y tienen la suerte de disponer de un amplio arsenal por el lugar donde han establecido su refugio. Ante esto debo decir que mucha tiene que ser la suerte para llegar a esa situación: 1) Recinto cerrado con zonas verdes, autonomía eléctrica, piscina, armas, etc.; 2) Supervivientes con puntería y capacidad para manejarse a la manera de un comando militar; 3) Alimento para mucho, mucho tiempo. Además, a esto se añade que tienen un médico.

No quiero decir que las dos situaciones anteriores no se pudieran dar en una invasión zombie, ni mucho menos. De hecho, incluso podría suceder que sobreviviéramos en masa y que el ejército se comportara como es debido y pudiese contener la estampida de cadáveres. Pero como mi fe en el ser humano es casi nula, me considero en la obligación moral de compartir mis reflexiones para que todos estéis preparados y no tenga que volver luego con un "os lo dije".

Hay que tener mucha suerte para poder encontrar un refugio con armas y, sobre todo, para aprender a usarlas. En España hay gente que se mueve con ellas habitualmente: por supuesto, las fuerzas armadas (militares, policías, cuerpos de seguridad...); pero también cazadores (y los hay, sobre todo en zonas menos urbanitas), gente cuyo hobby es aprender a disparar y, entre otras cosas, los bajos fondos de nuestra sociedad (traficantes, chulos, dueños de negocios ilícitos, etc.).

Pero para el común de los mortales ese es un universo que nos pilla lejano y a desmano, así que he preferido dar un paseo por mi casa y reflexionar sobre qué podríamos utilizar como arma, aunque se trate de objetos poco convencionales.

Las armas las calificaré según cuatro criterios, numerados sobre 10:
Dureza: dureza del material y, por tanto, capacidad para romper cráneos.
Resistencia: capacidad de aguantar golpe sin romperse.
Distancia: distancia a la que permiten golpear (cuanto más lejos, mejor).
Otros: otras características peculiares que puedan tener.

Teniendo en cuenta estos cuatro puntos, que variarán (y he establecido según mi punto de vista, otra persona podría tener otros y es discutible), daré la recomendación, también sobre 10.

1) Boken y Jo.


Aunque ya hablaré de esto cuando tratemos los hobbys que pueden contribuir a nuestra preparación de Supervivientes Máximos, os adelanto que he practicado un arte marcial, el Aikido, durante casi ocho años. Por eso tengo debajo de la cama estas dos pequeñas joyitas. Imagino que su resistencia se verá afectada por el hecho de que tienen ya ocho años, pero siguen siendo una buena opción para nuestro objetivo. Son duros y contundentes, y bien manejados pueden salvarnos de algún pequeño conflicto. Les doy un 8 como armas para mí.

2) Barras de cortina.


Normalmente vamos por casa mirando al suelo, al frente o a la tele. Y tendemos a olvidarnos que hay vida más arriba de nuestras orejas. Las barras de cortina son una opción considerable en caso de ataque Z, mucho mejores que las barras de cortina de ducha, que suelen ser enclenques y flojuchas (pero que, en caso de emergencia, podrían servir).
En este caso, se trata de dos barras de hierro forjado y una de madera gruesa que podríamos utilizar del mismo modo que las dos armas arriba señaladas. A esto se añade el punto extra de que con una lija dura podríamos convertir la barra de metal en una pica que, además de romper cráneos, puede ensartarlos. Mi puntuación está entre 8 y 9. Sobresaliente.

3) Palos de escoba / fregona.


El palo más recurrido que solemos tener siempre en casa es el de la escoba y/o la fregona. El problema qeu tienen es que son más flojos que nuestra seguridad económica ahora mismo. Si alguna vez habéis jugado a pelear con vuestros hermanos y/o amigos, habréis comprobado que a la mínima se doblan. Y esto, contra un zombie rabioso, no es nada bueno. Mi recomendación es su uso solo en caso de máxima emergencia y si no se tiene nada más. Con una excepción: si sois dos, uno puede usar la escoba para mantener lejos al zombie (o acorralado) mientras el otro le da golpes en el cráneo con otro objeto. Ahí su recomendación sube. Un poquito.

Y estas son las armas más seguras que he podido encontrar en mi casa. Los cuchillos, hachas de cocina y martillo de reparación son de corto alcance y muy peligrosos, por lo que he preferido no recomendarlos. Otro día trataremos más sobre las armas, centrándonos quizás en dónde encontrar armas efectivas que puedan sustituir nuestras armas caseras poco convencionales. Hasta entonces, se admiten sugerencias y discusiones. Un zombisaludo para todos y buen día!

Survivor!

PD: he escogido el primer enlace que había en google de una página de noticias al azar, aunque he leído lo mismo en varios medios de comunicación serios, tanto en inglés como en español. Y lo comparto con vosotros para que vayáis pensando en qué queréis comer en vuestro refugio durante los próximos meses. Un zombisaludo! [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Buen aporte, los palos de las cortinas es una buena idea, nunca habia pensado en ello y ahora que lo pienso, tengo unos de hierro que tienen muy buena pinta, se puede separar por la mitad, ya que ir con un palo casi mas grande que yo puede ser un poco engorroso xD

Y si lo separas por la mitad, con la otra mitad puedes hacer una pica

O llevar una en cada mano y liarte a dar palos en plan ventilador xDD

Muy interesante todo, nunca se me habia ocurrido lo de los hierros de las cortinas jajajaja