Spanish Zombies

Hola a todos, Spanish Zombies es el título de la novela que he escrito. Es una novela de temática Zombie, ambientada en varios lugares de España.

 Hace unos días he creado un blog, y una página web que espero poder ir mejorando.
 En el blog iré añadiendo algún capítulo, de momento solamente he puesto la sinopsis.

 Os adjunto el enlace del blog por si os apetece echarle un vistazo.

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Hola, ya he publicado el primer capitulo en el blog, por si os apetece echarle un vistazo.


  Día de Fallas, Valencia está plagada de turistas, pequeños grupos de personas empiezan a mostrarse convulsos y agresivos, aparentemente de manera irracional, lo que empieza focalizado en un día de fiesta, se extiende a gran velocidad por todo el país. Parece una infección, la rabia tal vez. Un yuppie y su prometida, un militar violento de fuertes principios, un abogado alcohólico sin escrúpulos, una chica de profesión atípica y un ingeniero acomplejado intentan sobrevivir y llevarnos a conocer la nueva situación de varios rincones de España. Esto es Spanish Zombies, no le cuentes a nadie el final.

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Muchas gracias por compartir el relato con nosotros.

Espero la siguiente parte con ganas.

Un saludo!

Gracias a vosotros por dejar compartir en vuestra página.

 Pronto publicaré otro capítulo.

 Espero que os guste.


 Un saludo.

Os había puesto mal el blog, disculpas.

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Espero que os guste.

Sandra 19 de marzo 20 horas.
Tenía que dejar aquel trabajo, si es que se le podía llamar así. Le quedaban unos miles de Euros para la entrada de la casa ibicenca en Sant Antony. A sus treinta años,difícilmente podría ya triunfar como modelo, los únicos trabajos que le ofrecían eran de promotora o azafata y no estaban bien pagados. No digamos de camarera, las últimas veces que la habían contratado, se pasaba la noche apartando moscones y por treinta euros la noche el propietario creía que también se iba a bajar las bragas. Así que en vez de por treinta, un par de años atrás, decidió hacerlo por tres mil. Muchas veces se arrepintió de no haber estudiado lo suficiente, de haberse dejado tentar por el dinero rápido, por los desfiles, por los casting... Era tan bonita que creyó que se comería el mundo, y el mundo se la comió a ella.
Ahora se veía más atractiva que nunca, pero como casi todo, aquello también tenía fecha de caducidad. Había ganado mucho dinero en los últimos dos años, otros dos más y podría retirarse para siempre en Ibiza, en la isla que le había dado la poca paz que le quedaba.
Cuando dos años atrás entraba en aquella agencia de modelos nunca pensó que le ofrecerían otra posible perspectiva de cómo ganarse muy bien la vida, la cogieron en un momento débil y se dejo llevar. Cuando algún cliente le preguntaba por qué se dedicaba a aquello, siempre contestaba lo mismo, sabía que querían escuchar una historia triste, un padre alcohólico, una madre drogadicta, un bebé inesperado en la adolescencia, un novio maltratador ..... Sabía que aquellas historias despertaban una mezcla de culpabilidad y paternalismo en sus clientes que generaba propinas directamente proporcionales. Pero a pesar de toda aquella inventiva, la realidad no era otra que la estrictamente monetaria. Además los clientes que acudían a aquella agencia de modelos no eran de cualquier bagaje, había tenido que acompañar a cenas, cocktails, branchs y demás a gente de elevado nivel social y económico, rematando la faena en hoteles de lujo.
No sería distinto aquella tarde, se había puesto el Gucci negro que tan bien le quedaba,
 
 
había guardado, como siempre, la beretta y el spray depimienta, junto con el maquillaje, y unas bailarinas de repuesto en su Louis Voitton, porque le gustaba sentirse segura. Abandonó su ático de lujo en la calle Sueca, en busca de un taxi que la llevara al Zenit del ayuntamiento. Al salir del portal notó un intenso olor a ceniza.... Ya está, siempre hay algún imbécil que le prende fuego a una falla antes de tiempo. Observó a la gente más exaltada de lo habitual incluso para ser fallas, un policía esposaba a un tipo con aspecto de inglés que se revolvía violentamente boca abajo en el suelo. En ese mismo momento, vio a sus vecinos, el banquero y su novia en la acera de enfrente, salían corriendo de un puesto de cervezas mientras un grandullón pelirrojo les perseguía. Él se abalanzó sobre un taxi que se paró en seco. Mientras un tipo de baja estatura, con bigote y cara triangular se abalanzó sobre ella. Sandra dio un paso atrás y le lanzó una de esas patadas con giro que había aprendido en full contact, como ya he dicho le gustaba sentirse segura, esta vez le costó mantener la vertical por los tacones Manolos que se había puesto. Así que se los quitó y los cogió con su mano izquierda, el hombrecillo se estaba levantando lentamente mientras la miraba a los ojos y un hilo de baba resbalaba por su barbilla, Sandra no se lo pensó y le lanzó una patada en la boca que le hizo crujir el cuello. Al estar descalza el dolor fue indescriptible. Cojeando quiso dar la vuelta a casa pero varios tipos que caminaban lentamente obstruían la calle avanzando hacia ella. Uno de ellos saltó sobre la espalda del policía que aun luchaba con el tipo inglés y le asestó un mordisco en la nuca, arrancándole tiras de piel y carne. El terror se hizo presa de Sandra e intentó avanzar en la otra dirección tras sus vecinos, pero el enano bigotudo ya estaba de pie, y con los ojos ensangrentados la flanqueaba mirándola fijamente. A la mierda- exclamó- tiró los zapatos, sacó de su bolso el spray de pimienta y roció a aquel sicópata en toda la cara.
Siguió avanzando con una leve cojera mientras vio a su vecino correr detrás de un taxi que lo dejaba atrás. Otro taxi paso en ese momento a toda velocidad, Sandra le hizo seña de parar pero sabía que tenía pocas probabilidades de éxito dada la escaramuza surrealista que se había montado.
 
Unos doscientos metros más adelante vio como su vecino se situaba en medio de la calle para frenar el vehículo que ilógicamente aceleró más e hizo saltar al banquero dos metros por el aire, cayendo como un peso muerto en el suelo. Mientras, un grandullón pelirrojo avanzaba lentamente hacia el cuerpo tirado en la calle......

Teddy 20 de marzo 14 horas
Ya estaban tomando la desviación hacia el puerto por la autopista A3, el viaje se le estaba haciendo corto. En la parte de atrás del camión IVECO él y otros diez soldados mantenían una calma contenida y un tenso silencio. Teddy fumaba un cigarrillo tras otro, no estaba en su mejor forma, pero no estar en su mejor forma para Teddy era un estado muy superior a la media.
Se había armado con la ametralladora G36 y varios cargadores de 30 balas, así como con la reglamentaria Llama y cuatro cargadores de 15 proyectiles, completaba el arsenal con una granada Alhambra, a la que se prometía dar un buen uso.
Al entrar en Valencia por la Avenida del Puerto, por la ventana trasera del vehículo contemplaron la decadente situación de la ciudad, el vehículo iba rápido, con lo que lo que no podía detener su mirada demasiado tiempo en el mismo punto, la sensación que tenía era de ciudad fantasma, el olor a ceniza comenzaba a inundar el ambiente de la parte trasera del vehículo. Cuando estaban llegando a la Avenida Reino de Valencia, lo vio, era el primer infectado que veía, un hombre vestido con uniforme de barrendero con toda la espalda empapada en sangre golpeaba su cabeza contra el tronco de un árbol, se golpeaba constante y rítmicamente, no era una actitud, desde luego, racional, al escuchar el ruido de los camiones se giró y comenzó a caminar hacia ellos, Teddy le vio los ojos, inyectados en sangre, la mandíbulaliteralmente desencajada, arrastraba los pies lentamente. Desenfundó su Llama M-82 pero no tuvo tiempo de apuntar, mientras, un escalofrío de terror recorría su espalda.
Al llegar al ayuntamiento desembarcaron de los camiones, rápidamente Gálvez ayudó a Ramos y Alemany a preparar la Browning en una torreta, la situaron ante la puerta del Ayuntamiento, cubriendo sus espaldas contra la misma. Los francotiradores se situaron en posición.
No había ni un alma, los Grupos comenzaron a avanzar en abanico.
 
 
-Tirad a matar- espetó Alemany.
-Es todo un poeta- pensó Teddy.
El grupo de Teddy avanzó en dirección Este hacia la estación de Xátiva, iban Mac y Suárez en primera línea, otros tres hombres en segunda, cuatro tras ellos y Teddy cerraba el grupo. El silencio era aterrador, es curioso como se oye silbar el aire en una ciudad sin energía, sin coches, sin ruido…. Bueno en realidad si había coches, pero prácticamente desguazados, parabrisas rotos, incluso vieron un autobús y una ambulancia que se habían estrellado el uno contra el otro.
-Menuda fiesta se han pegado aquí anoche, y luego se han pirado todos, no hay ni un solo cuerpo- pensó Tedy.
Al llegar a la calle de Xátiva continuaron avanzando por la Calle Bailén, dejando atrás la estación de tren y la plaza de toros.
-¿Todo en orden Grupo Mac?- sonó Alemany por el transmisor.
-Ni un puto alma- contestó Mac.
Sin embargo aquellas palabras fueron como el abra-cadabra, un estruendo irrumpió a sus espaldas, provenía de la estación de tren, el silencio desapareció en pos de unos gritos desgarradores, la pequeña escuadra se giró de golpe al unísono, el sonido lento pero in crescendo continuo se acercaba desde la estación.
-Posición de combate.
El característico sonido de las armas preparadas, y amartilladas apenas si se pudo oír, ya que el rugido masivo y estruendoso se acercaba cada vez más, en ese momento como si de una manifestación se tratase, un grupo de “cosas” tomó la curva de la calle Bailén. Eran unas treinta personas, o lo que quedaba de ellas, todos arrastraban al unísono los pies y se acercan a un ritmo lento pero constante. Había hombres y mujeres adultos, adolescentes y niños, alguno le faltaba un brazo, otros mostraban sus carnes desgarradas, a Teddy le llamó la atención una mujer oronda vestida de enfermera, le faltaba la mitad derecha de la cara, la herida parecía cauterizada. A su derecha por detrás Teddy percibió el inconfundible olor del orín, el soldado Morales se había orinado encima, Mac se había quedado sin palabras, no daba ninguna instrucción. Teddy tomó la iniciativa, a pesar de estar completamente acongojado:
-Alemany vienen unos 30 todavía no los tenemos a tiro, son asquerosos.
-¿Alguno sano?- se oyó por el transmisor.
-Negativo.
La comitiva de bienvenida seguía acercándose…..
-¡Quietos!- Gritó Teddy- a mi señal los freímos.
Estaban a unos cincuenta metros, pasaron unos segundos que se hicieron eternos hasta que….
-¡¡FOLLÁROSLOS A TODOS!!- gritó Teddy mientras comenzó a disparar a quemarropa, sus compañeros al unísono hicieron lo propio.
Tras treinta segundos de estruendosa mascletá con polvareda incluida, ante sí yacía el grupo de rabiosos.
-No ha sido para tanto- exclamó Mac con una voz temblorosa por la adrenalina.
-Otro puto abracadabra, mejor estarías callado cabrón de los cojones- pensó Teddy.
En ese momento los infectados comenzaron a levantarse, no todos, pero sí la mayoría, se levantaron y comenzaron a andar de nuevo.
-¡Me cago en la puta, disparad!- otra ráfaga más corta que la anterior- retroceded unos metros, lentamente el grupo de Mac, que ya era el grupo de Teddy, avanzó de espaldas.
 
 
Teddy se fijó en la enfermera sin cara, vio como se levantaba lentamente, sacó su Llama reglamentaria apuntó a la cabeza y disparó, el cuerpo de la gorda cayó a plomo. Entonces se dio cuenta, mientras los demás monstruos se ponían de pie y comenzaban a caminar hacia ellos lentamente.
-¡¡Joder, disparadles en la cabeza!!
Esta ráfaga tuvo un ritmo más reflexivo, pero mucho más efectivo…. Se oyeron algunas risas, y algún que otro suspiro entre el grupo.
-¡Alemany, nos los hemos follado! Si veis alguno disparad a la cabeza, o se levantarán.
Entonces Teddy, vio como un grupo muy superior al anterior giraba en la calle Xativa hacia ellos, los disparos los habían atraído sin duda, no pudo calcular cuántos eran, pero más de cien.
-Grupo Uno al habla, se nos acerca una manifestación de frikis, son demasiados, por favor Alemany envíanos refuerzos.
-Grupo Dos y Tres retroceded y echad un cable al Uno- dirigió Alemany.
-Grupo Dos al habla, recibido, por aquí todo limpio, vamos.
-¡Grupo tres al habla! Negativo, nos están atacando, estamos entretenidos.
-¿Teddy podéis echarles un cable?
-¡Su puta madre aquí vienen más de cien hijos de puta! ¡Mándanos a alguien, o ven con la puta Browning!
-¡Alemany! ¡Alemany responde! ¡joder!
En ese momento se perdió la comunicación entre las escuadras….

¿Hay alguien ahí?
Permanecimos dos días, creo, prácticamente en silencio, la lluvia duró unas horas. Nos alimentamos de leche, conservas de pescado y agua. El tenso silencio solamente se veía interrumpido por la pesada respiración de Alex o por los sollozos de Sandra.
Cuando la luz entró por el bajo de la puerta al tercer día del infierno, Teddy amartilló su pistola, y comprobó que estaba lista. Sandra casi imitándolo hizo lo mismo. Me dio el bate. 
—De momento es lo que hay —me dijo.
—¿Y yo? —Dijo Alex.
—Coge todo el agua y víveres que puedas llevar. Cuando abra esa puerta yo iré el primero, a partir de ahora siempre iré el primero cuando os lo diga. Sandra cerrarás el Grupoy delante de ti siempre irá Alex.
—¿A dónde vamos? —Pregunté.
—A buscar a Noa.
—Oye, no hemos discutido eso —dijo Alex.
—Esto no es una democracia —le contestó Sandra, a quien se notaba que Alex no le caía muy bien—. Si no quieres venir, vete.
Teddy se sonrió con cierta tristeza, le estaba pelando la cara como a un británico en las Islas Canarias después de una semana de baños de sol. Subió la escalera con una mochila cargada de latas y agua a la espalda, y me hizo una seña para que lo acompañara, arrancó las tablas de la puerta, entre los dos la abrimos, y tuvimos que apartarnos rápidamente para que unas cuantas rocas y ladrillos, bajaran rodando y aplastando los escalones.
Una vez la entrada estuvo despejada, avanzó con el arma apuntando en movimientos horizontales, únicamente unos metros, hasta que se topó con una mole de escombros y roca.
Tras él, atravesé la puerta sosteniendo el bate como si fuera a golpear una bola importante, detrás de mi veniaAlex con algunas botellas y latas de conserva, además todos llevábamos algún vívere repartido por los bolsillos, el grupo lo cerraba Sandra con la beretta en ristre. Una de las cosas que aprendí con Teddy esos días, es que cuando tienes un compañero cubriéndote la retaguardia, no es necesario mirar atrás, únicamente debes vigilar tu ángulo de visión.
Donde había estado el bar, ya solamente había escombros, tuvimos que trepar entre ellos para salir a la que unos días atrás había sido una concurrida calle. La luz me molestaba increíblemente en los ojos, casi no podía abrirlos, los tres días de oscuridad casi nos dejan ciegos.
Todo escombros, moles de piedra y ladrillo, algún edificio había conservado parte de su estructura, pero todo formaba parte de un siniestro escenario, montones de chatarra que habían sido vehículos, el suelo destrozado en algunos puntos como si una ola tsunami de tierra y cemento armado lo hubiera partido por la mitad. Pensé en Charlton Heston, y en el Planeta de los Simios, en todas aquellas películas de ciencia ficción en las que nunca creí, pensé en como Noa me decía a menudo que la realidad siempre superaba a la ficción cuando hablaba de nuestra historia, de cómo nos conocimos, de todo lo que había dejado de ser individual para ser lo nuestro.
¿Y ahora qué? Pensé, ¿por dónde empezamos?
—Iremos a Betera —dijo Teddy—, en mi base teníamos un helicóptero AB—2012. Si la onda no ha llegado hasta allí y no se lo han llevado, podemos volar hasta Mallorca.
—¿A cuánto está Betera? ¿A unos 20 kilómetros? El infierno habrá llegado hasta allí —Dijo Alex.
—Es probable, pero debemos intentarlo —Contestó el militar.
Caminamos durante cinco horas hasta que llegamos aBetera, después de los últimos acontecimientos no estábamos en nuestro mejor estado de forma. En el camino vimos escombros, atravesamos la CV—310, o lo quedaba de ella, a los lados vimos moles de piedra informes donde había habido viviendas, vimos los polígonos industriales convertidos en cenizas. Nos acompañaban numerosos socavones, e incluso algún que otro cráter que tuvimos que bordear, la ola de expansión había llegado muy lejos, y Alex no se había equivocado, cuando llegamos a Betera, la base estaba derruida, más bien no estaba. Decidimos descansar allí, y pasar la noche entre los escombros y restos de la antigua base. Mientras Teddy nos contaba a Sandra y a mí donde había estado físicamente cada cosa en un pasado inmediato, sentados en el suelo, Alex deambulaba entre los escombros de lo que había sido el hogar laboral de Teddy.
La noche se aproximaba, y decidimos cenar lo antes posible para descansar pronto y partir con el alba, tras valorar las pocas opciones que teníamos, decidimos que a la mañana siguiente nos dirigiríamos hacia Colmenar Viejo, Madrid, donde se encontraba el cuartel general del Ejército de Tierra español, probablemente la onda expansiva no había llegado allí, y con suerte podríamos encontrar a más supervivientes, o al menos encontrar uno de los ciento sesenta helicópteros que tenía el Ejército detierra disponibles, que nos pudiera llevar a Mallorca.
Mientras tanto, Alex nos miraba sentado desde un montón de escombros a unos cincuenta metros, nos miraba fijamente, pero en realidad miraba a Sandra, sus piernas, su cuerpo ceñido con aquel fabuloso vestido negro, la lujuria recorría su cuerpo, a estas alturas lo daría todo por acostarse con ella, decidió que lo mejor para calmarse era moverse un poco así que siguió hurgando entre los escombros. Debajo de una mole de ladrillo, pareció ver sangre, así que empujó el bloque con todas sus fuerzas, empujó y empujó hasta que consiguió desplazarlo, y bajo él encontró un brazo desmembrado y aplastado, cuyos dedos sujetaban una metralleta, más tarde, supo por Teddy, que se trataba de una Heckler de 9 mm, un subfusil de asalto, pero en aquel momento lo único que sintió fue nauseas, que redundaron en un vómito de bilis.
Arrancó el arma de los dedos gangrenados y se dirigió a nosotros con ella en ristre.
—Dame eso —le dijo Teddy.
—La he encontrado y me la quedo —contestó Alex apuntándonos con el fusil.
—No nos apuntes, hijo puta —le dijo Sandra, mientras arrastraba la mano hacia su beretta.
—¡Baja el arma! —Le gritó Teddy—. No es un puto juguete.
—Vaaalee, sois gilipollas, qué os iba a hacer, pero la he encontrado yo y me la quedo.
Apuntó hacia el horizonte y disparó para comprobar si funcionaba, nada…
—No funciona.
Teddy se levantó y le arrancó el fusil de las manos, la amartilló, y disparó un tiro al aire.
—Tienes que quitar el seguro —le dijo—, es tuya, es justo, la has encontrado, pero no malgastes las balas igual las necesitaremos.
—¿Has encontrado algo más? —Le preguntó Sandra.
—Ahí no hay nada —le contestó mirándola con lascivia y se sentó.
Compartimos unas latas de atún y un poco de leche desnatada, y nos echamos a dormir, quedamos en hacer turnos de vigilia de hora y media, aunque probablemente fuéramos las únicas personas en muchos kilómetros a la redonda. El primer turno lo hizo Teddy, luego me tocó a mí e inevitablemente me quedé dormido, de repente sentí como si una mano helada me hubiera tocado la nuca y me desperté… nada, silencio absoluto. En seguida tendría que despertar a Alex para que hiciera su turno, me fijé en él, estaba despierto, miraba fijamente a Sandra que dormía acurrucada y tapada con una vieja manta, con la boca entreabierta, mientras un hilillo de saliva le resbalaba por los carnosos labios. Alex tenía la cara desencajada, parecía excitado, ya me había percatado de aquellas miradas sucias que dirigía a la chica, pero me estaba empezando a preocupar.
—Alex —susurré—. Alex —no me oía—. Alex —un poco más alto.
—¿Qué? —contestó en voz alta, como si los demás no estuvieran durmiendo.
—Habla bajo, coño —le dije—. Voy a dormir un poco, despiértanos dentro de una hora.
—OK, princesa —me dijo, y caí dormido en un profundo sueño.
Sentí que me acariciaban el pelo con suavidad, y desperté lentamente…
—Buenos días Noa, te quiero cariño —dije medio dormido.
Pero no era Noa, era Sandra, que se sonreía mirándome con dulzura.
—Despierta, nos vamos —Me dijo.
Ya estaban todos levantados menos yo, en pie esperando a que me despertara y me pusiera en marcha, la verdad es que no tardé mucho, me puse los zapatos y listo, me di cuenta de que no debía oler muy bien, después de tantos días sin una buena ducha. 
Teddy me tiró un mendrugo de pan, que cogí con torpeza, estaba duro, y rancio, pero era lo que había.
—Desayuno continental —Dijo Alex.
 
Nos pusimos en marcha hacia Colmenar Viejo…..
 


Este es el último capítulo colgado en nuestro blog, por si os apetece seguir la historia.
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Te digo que me ha encantado!! disfrute mucho leyéndola y con el soundtrack que pusiste de la película da un toque de agitación a la historia, excepto cuando se trabo al minuto -_- eso arruino el momento cuando me estaba imaginando la historia perfectamente  :') . Me he quedado con las ganas de continuar la historia así que visitare tu blog   

Saludos!!

Muchas gracias por tu apoyo, siento lo de la música, a veces pasa y te corta el clímax.

 Seguiremos publicando capítulos, y esperamos que pronto salga el libro.

 Gracias!!!! Espero que lo sigáis disfrutando.

Jejeje no importa, tal ves debí dejar que cargara toda   , acabe de terminar de leer el ultimo capitulo que subiste, pero te cuento que al principio me sentí un poco desubicada respecto a la continuación de la historia   jeje, así que busque desde el inicio de la historia hasta donde iba para poder ubicarme, y me sigue fascinando    esperare el siguiente capitulo. Que emoción !! y ojala salga el libro pronto.  

Saludos!!

No puedo decir más que gracias de verdad.
Si todo va bien pronto podré informaros de cuando y como se publicará.
La verdad es que si no empiezas desde la primera entrada induce a la confusión.


Gracias otra vez, me alegro mucho de que te haya gustado.

Jejeje vale, creo que no mire bien, jejeje que si me  gustado? me encanto amigo!!   me la he pasado toda la mañana leyendo, lo mostrare a mis conocidos para que lo lean, tienes talento  ojala salga pronto.    Al igual que el capitulo siguiente quede con la intriga -_-   

Te lo agradezco un montón y la difusión por supuesto que también.

 Esperemos que pronto.

Un saludo y gracias de nuevo.

Jeje vale  , y si depronto tienes mas de tus escritos por hay, no dudes en subirlo, con gusto tienes alguien aqui que lo leera =D Saludos a ti tambien !!

Pues nada muchas gracias por permitirme escribir aquí todo este tiempo.

 El próximo 15 de agosto se publicará Spanish Zombies, gracias a la editorial Círculo Rojo.

 Tenéis toda la información en mi blog: http://zombi-spanishzombies.blogspot.com.es/

Por fin ha llegado el momento,  Spanish Zombies: Genesis llama a vuestras puertas, los zombies invadirán España dejando un rastro de muerte y destrucción.
Dejadnos entrar  y uniros a nosotros...


Más información en nuestro blog:

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Muchas gracias a este foro por permitirme hacer públicas partes de la novela desde un principio.

 Gracias.