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Segunda prueba
¿Furulas?

Cobardia. El fin de nuestros tiempos.

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Cobardia. El fin de nuestros tiempos. Empty Cobardia. El fin de nuestros tiempos.

Mensaje  sombrablack Dom Ene 24, 2010 7:43 am

Se encuentra hasta lo que llebo en mi blog [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] y en el foro somosleyenda.com disfruten.

30 de enero del 2030.

Caso L.R.C.D.G (Las Repúblicas Confederadas Del Globo) contra el DR. Jacob Miller.

Entrevista sobre los eventos en la nave DEFCON 1.

(El acusado ha sido privado del sueño durante 3 días, el sistema de tortura estaba prohibido por los tratados de Ginebra. Se ha hecho una excepción con este recluso debido a la crueldad y aberración que fueron sus experimentos.)

Señor Jacob, ¿Sabe por qué esta aqui?

Jacob.- Esa es una pregunta estúpida, la razón es por el brote en Maryland de la cepa A K2 Z4. Fue un incidente aislado. Si no hubiera sido por la estúpida respuesta militar de parte de ese país de brutos, no se hubiera expandido. Me culpan a mí y fueron ellos quienes lo mandaron a la atmosfera.

(Jacob se acurruco en sus brazos tratando de conciliar el sueño.)

¿A qué se refiere con eso?

Jacob.- ¡No me joda cabroncete de mierda!, usted sabe a que me refiero. ¡Las bombas!, las putas bombas que lanzaron; cumplieron su cometido, Hicieron mierda a los infectados, ¡pero mandaron la cepa a los 4 vientos! No tardaron más que 2 semanas para que otras ciudades en un radio de 10km de Maryland cayeran en una epidemia. Se separo E.U.A, todo el territorio perdido fue bardeado, pero además de eso no hicieron nada. Como si nada evacuaron a los supervivientes, los cuales ya habían sido en su gran mayoría infectados, asi fue como el virus se esparció. México actuó de una manera mas adecuada; dejo a un lado su humanitarismo, y empezó una matanza de todos los ciudadanos estadounidenses en territorio mexicano, era la ironía más merecida de la historia de la humanidad; tantos mexicanos cruzaban ilegalmente a estados unidos, los trataron como mierda, y luego todos los estadounidenses corrían hacia México y eran hechos mierda. El daño estaba hecho el virus se expandía por toda América y empezaron las mutaciones que causaron "La caída".

DR. ¿De que mutaciones hablas?

Jacob.- ¿Nunca los vio?

¿Ver que?

Jacob.- El virus los mutaba, Dependiendo de su entorno, un tipo de evolución muy bizarro, (sonríe) había unos de ellos, en el norte de Canadá, se volvieron extremadamente gordos, para mantener la temperatura corporal y no congelarse, se alimentaban de los supervivientes, de una manera muy curiosa, sus brazos y manos se volvieron casi inútiles. Creo yo que el video sigue en la red, era un video de esos seres atacando a una familia (Sonríe, mientras sus ojos inyectados en sangre se imaginan la escena, casi como si disfrutara el tan solo pensarlo), increíble. Saltaban sobre los niños, y con sus enormes quijadas desagarraban la mandíbula de los niños, de ahí se iban al cuello, extrayendo la tráquea, y luego aplastaban el cadáver para hacer que los órganos internos, salieran por el orificio de la traqueal, a los adultos, no les fue mejor, al hombre lo devoraron hasta el ultimo tendón y a la mujer se la llevaron.

Dr., la cepa de Maryland, afectaba a todos pero los niños no sobrevivían a la infección, pero hay fotos de cientos de niños infectados corriendo por los callejones de la ciudad ¿Qué es lo que pasó ahí?

Jacob.- El virus, no la perfección que cree aprovechaba todo el cuerpo del huésped, hasta el punto de que un infectado era capaz de reproducirse con una mujer sana o infectada. Es por eso, que hay mujeres que no son devoradas, simplemente se las llevan los infectados.

(La puerta del cuarto se abre, de manera que un hombrecillo le hace señas al policía)

Señor Myller, le dejare solo durante unas horas, para que pueda dormir un poco y luego continuaremos con el interrogatorio.....
¡JACOB DESPIERTA!; es hora de continuar.

Jacob.- hijo de su puta madre, si me van a hacer algo háganlo ya.

Dr., ¿Como creo el virus?

Jacob.- Empecé con una simple investigación del virus de la influenza, al mismo tiempo trabajaba con la rabia y el ebóla; surgió de un momento a otro. Los mapas genéticos de la influenza fueron creados por científicos tratando de hacer una cura. Ese virus era tan perfecto y yo lo mejore, la enorme capacidad del virus de mutar fue lo que me dio la base y luego la rabia atacando el cerebro y este virus seguiría afectando por la saliva, finalmente el ebóla, jodiendo el sistema vital e infectando a otros seres humanos con cualquier fluido. No fue mi intención que acabara asi, lo que necesitábamos era un virus mortal, que pudiera ser controlado.

¿Necesitábamos?

Jacob.- de donde cree que saqué los fondos, es claro que no vendía chocolates de puerta en puerta.


1 de Febrero del 2030

Nave alpha4
sector Zona CERO
Orbitando la tierra

Teniente Michael Fant.

Día 301

Ha pasado casi un año desde que me asignaron a esta nave, hoy cumplo 24 años y me aliste en la armada el 25 de abril del 2024. Recuerdo el día de nuestro éxodo, llevábamos 200 días de asedio constante, se lanzaron las primeras 3 naves, hacia 3 estrellas diferentes.

Como comenzó, bueno empezó en Estados Unidos se extendió por América y luego salto a Europa.

Al principio eran hordas lentas y torpes que no distinguían entre ellos y nosotros, pero poco a poco se fueron adaptando. Pronto no solo caminaban si no que eran capaces de correr a la misma velocidad que nosotros.

Durante la caída, miles de personas emigraban en caravanas sin ningún rumbo fijo, creo que solo buscaban un lugar donde sobrevivir.
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Dr. Jacob, cálmese dígame como sucedió la tragedia del DEFCON1

Jacob.- Siento decirlo, pero no fue mi culpa. Como ya había dicho antes, dejaron pasar supervivientes sin ningún tipo de control, uno de los supervivientes debió de ir infectado, entre unos 500 mil supervivientes te has de imaginar la carnicería que se llevó acabo en esa nave. Huimos, no puede ser como es posible que hayamos huido. MALDICION que cobardes fuimos. Debimos luchar como se debía y asi todavía estaríamos en casa.

Dr. Jacob. Ya se conoce su condena, será enviado a la tierra. Morirás en las manos de tu propia creación.

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Ciudad de Shinomarí
Base espacial del sector de prisiones

Aquí el juez Mijaneto Huatiza

Alpha4, se le informa el envió del prisionero Jacob Myller, condenado al aislamiento en el planeta tierra, debido a sus crímenes contra la humanidad y el designio de dios. Con la creación del virus que nos expulso de nuestro planeta natal. Se le asigno al Teniente Michael Fant el escoltar al prisionero desde su aterrizaje hasta el lugar donde tenga una posibilidad de sobrevivir, después de cumplir con esa orden será evacuado y enviado al planeta CERA1 durante 15 días para prevenir la expansión del virus de nuevo.

También escoltara al biólogo Rafael Martinéz, debido a la alerta del doctor Jacob sobre la mutación del virus, usted lo escoltara por todo el sur de lo que eran los estados unidos, para reconocer y analizar las variantes del virus de manera que en algún futuro desarrollar una vacuna eficaz y segura capaz de invertir los efectos del virus.

Debido a los trabajos de desinfección que aun se llevan acabo en la nave DEFCON1, solo será enviado usted el prisionero y el biólogo, ponemos en sus capaces manos la supervivencia de una de nuestras mejores mentes. La mayor prioridad de su misión es escoltar al señor Rafael y traerlo de vuelta sano y salvó.


3 de Febrero del 2030

Nave alpha4
sector Zona CERO
Orbitando la tierra.
Micheal por primera vez observo al hombre que llevo a la humanidad al extremo de tener que huir de su propio planeta, planteándose mil preguntas en la cabeza sobre el por qué de sus acciones, lo único que logro hacer fue, estrecharle la mano a ese hombre que condeno la humanidad a correr de su pasado, ante la atónita mirada de los custodios de Jacob, que sabían acerca de la incontrolable carácter que poseía Micheal.
A partir de aquí yo me haré cargo del doctor.- le dijo Micheal a los custodios; después de que desaparecieron los custodios por la compuerta de titanio, Micheal tuvo que saciar su curiosidad y le dijo.- Realmente no creo que tengas mucha prisa en ir allá abajo, así que, que tal si nos ponemos a charlar unos momentos, ¿Te parece?.
Jacob lo miró y le dijo.- Al fin alguien que pide las cosas tan cortésmente como se debe. Así que ¿Qué quieres saber?, Micheal lo miro y le dijo.- ¿Por qué creaste el virus?
Jacob alzó una ceja y le dijo.- no solo lo cree yo, hubo personas quienes financiaron mi investigación, el virus lo cree para un grupo de personas que compartían mis ideales. Jacob observaba a Micheal fijamente y detrás de el se encontraba la compuerta por donde entró Rafael.
Micheal al verlo simplemente dijo.- Creo que es hora de descender. Un silencio incomodo lleno la habitación con nerviosismo y temor, sin embargo Jacob parecía estar mucho mas tranquilo que Micheal y Rafael.
Los tres se acercaron al hangar de la nave, para que los soltaran en el tanque todo terreno COBRA, la atmosfera estaba diezmando la coraza del tanque, el más pequeño error en la trayectoria de la nave, podría significar la muerte para todos sus tripulantes.
Rafael y Micheal, cerraban los ojos, y oraban al su dios, mientras Jacob esta inmutado en su asiento, mientras miraba como el la nave se acercaba mas y mas al agua, hasta que impacto con ella.
Los primeros segundos después del impacto fueron transcuyendo de manera lenta, casi como la bienvenida de un padre al hijo que lo había abandonado, durante el cabeceo de la conciencia y la inconsciencia, Micheal logró escuchar la multitud de gritos, alaridos y gemidos que se excitaban después del espectáculo de luces, que su discreta llegada había provocado.
El tanque se remolcó automáticamente hacia la orilla más cercana, Veracruz en el Golfo de México, una mala suerte, por que será un camino largo.
La misión era escoltar al doctor Jacob hasta un lugar donde tuviera la mínima posibilidad de supervivencia, eso seria en el desierto que rodea la frontera de Mexico con estados unidos. El desierto, al parecer el único ecosistema en el cual los infectados no pueden sobrevivir, de paso Rafael inspeccionara las ciudades y pueblos de esa región para documentar cualquier tipo de mutación en los infectados.
Cuando los tres hombres salieron del tanque, se encontraron con que las antiguas ciudades portuarias y las playas habían empezado a sucumbir ante las plantas y la maleza que ya habían logrado brotar, los enormes edificios que se observaban antes ahora no se podían observar atraves de las frondosas e inmensas copas de los arboles, creando un techo natural que mantenía las lluvias ocasionales fuera de los senderos transitados por animales y muchos de los infectados que seguramente poblaban ese lugar.
Rafael, estaba como loco, con una mirada llena de terror, debido al hecho de que ahora estaban en territorio enemigo. Jacob por su parte simplemente se apoyo en el tronco de un árbol y prendió un cigarro de los que le había robado a uno de sus custodios.

Micheal sello la puerta del tanque ante los gritos de propuesta de Rafael, el pobre tipo prácticamente lloraba por que se fueran en el tanque y así estarían mas seguros, Jacob reía entre las bocanadas de cigarro, hasta el punto que altero los nervios de Rafael y este se dispuso a golpearlo, Jacob esquivo el golpe de Rafael, y le acertó un severo golpe en la nariz. Poco a poco se acerco a Rafael y le susurró al oído: “si se van en ese armatoste, no tendrán suficiente combustible para volver a orbita y demoraran días en venir por ustedes”.
La charla si se le podía llamar así hubiera podido continuar así, si no hubiera sido por el hecho que el olor a sangre, se expandía por todos lados, y se empezaron a escuchar cientos si no es que miles de gruñidos y gemidos al unisonó. Micheal miro a Jacob, se giro para tomar las 3 ametralladoras, 15 cargadores de ametralladoras y 15 de pistola, 9 granadas expansivas y 3 pistolas calibre .75. Que se encontraban en el interior del vehículo.
Después de colocarse debidamente el equipo que consistía en un chaleco antibalas, una chaqueta de tela tan gruesa como para resistir los dientes de cualquier persona y unos guantes del mismo material, el pantalón resistía un poco menos, para dar mayor movilidad y unos tennis comunes y corrientes.

Los gemidos en el fondo de la escena se iban apagando excepto unos que se escuchaban cada vez mas cerca, salvajes y excitados. Fuesen lo que fuesen no eran humanos y tampoco provenían de ningún animal.
Micheal les dijo: “observen con atención les voy a enseñar como se dispara”. Cerró un ojo y con el otro empezó a buscar entre los frondosos arboles que estaban enfrente de él.
Los primeros empezaron a llegar, eran 5, sus ropas estaban tiesas y carcomidas, desgastadas después de todos los años que llevaban no muertos, entre los trozos de ropa que les colgaban, se distinguían larvas que brotaban de entre los purulentos pedazos de musculo, sus ojos, estaban inyectados en pus y liquido cefálico, sus cuerpos estaban al borde de ser esqueletos, y sus cabezas apenas distinguían uno o dos pelos, los dientes que mostraban al gemir eran, negros y expedían un olor a podrido terrible, junto con todos los gases que brotaban de sus ya vacios estómago. Excitados por la visión de seres humanos que no habían visto desde hace años. Aunque en segundos acabaron muertos en el suelo con solo tiros 5 todos ellos acertaron en la cabeza.
Pero desde atrás se escucho un rugido mucho mas profundo y enfurecido, y desde lo profundo de la selva se acerco esa creatura de 2 metros de altura de una tonalidad verde opaca, corpulento, con unas manos convertidas en garras, cubiertas de marcas de sangre seca y unos ojos negros encendidos por el fuego interior que representaba su hambre, de los 2 metros que representaba su estatura, 1 metro 20 centímetros eran la longitud de sus piernas, las cuales eran capaces de recorrer 50 metros en menos de 5 segundos.
La distancia que lo separaba de los 3 hombres eran unos 150 metros, los primeros 3 segundos Micheal no reaccionó, tardo 7 segundos en lograr tener una buena vista, 2 segundos en apuntar y tres segundos en observar como el engendro caía al suelo, debido a dos tiros acertados justo en las rodillas, mientras el ser se arrastraba hacia los 3 hombres, Jacob desenfundo su arma se acerco un poco al extraño ser, le apunto a la cabeza y entre sus morbosas risas le dijo a Micheal: “ No Micheal, es así como se dispara”.
Después del sonoro impacto de la bala con el cráneo de la creatura, el biólogo Rafael, temeroso pero cumpliendo con su deber se acerco al cadáver de aquel ser y se dispuso a catalogarlo. Saco su cámara instantánea, una pequeña libreta y empezó a escribir.
Después de unos minutos Rafael se reincorporo al grupo, y los 3 hombres empezaron su viaje atraves de la jungla que había nacido de lo que antes era el puerto de Veracruz.
El caminar por esos parajes daba una sensación extraña, una tormenta de emociones enfrascadas, a cada paso hacia delante que daban. A Micheal y Rafael se les notaba en la cara la nostalgia que era el saber que su planeta había sido abandonado. Y Jacob no se inmutaba por la atmosfera que lo rodeaba, creo que esta una vez lo vi sonreír, ante el desolado escenario que tenia enfrente. En su tiempo, Veracruz puerto había sido, una de las atracciones turísticas mas importantes del país. Era un lugar en el que la vida trataba de la mas pura y adictiva parranda, durante los días que precedieron a la caída este lugar debió de haber sido un terrible manicomio; no quiero ni ponerme a pensar, en las carnicerías que se llevaron acabo, la amante infectada, atacando desnuda a su hombre, devorándolo. Simplemente una imagen terrible.
Pensar eso era igual de perturbador que ver el escenario que se habría ante aquellos 3 hombres, que de una curiosa manera cruzaron caminos.
Barcos encallados en la playa, oxidados y destruidos; los automóviles estaban estrellados contra los muros de concreto, miles de vidrios rotos entre los edificios y las casas, edificios en ruinas que cayeron por los incendios, que acontecieron durante los primeros días de la caída.
Miles de sonidos eran audibles atraves del día, pero durante la noche los sonidos eran aun más fuertes, macabros y fríos que quebraban el silencio que debería suponer la noche. El cruzar esa selvática región no supuso mas problemas como el primero, muy de vez en cuando se cruzaron con algún infectado mientras cruzaban la ciudad, pero por suerte no fue ninguno como el ser ese, que se les había presentado.

Día 5
Superficie terrestre
Diario del teniente Micheal Fant.
22:30 hrs.

“Hemos caminado días, y por ahora solo nos hemos encontrado con ese ser selvático y demás infectados, la mayoría demacrados por los años que llevan. Rafael no lleva la situación muy bien, durante las noches habla dormido, llora por alguien; en el camino que ha recorrido la humanidad, sus guerras y triunfos, todos sacrifican y pierden algo.
Yo perdí a mi familia, escape solo, vi como devoraban a mi padre, mi hermana muerta por una bala perdida y mi madre, aplastada por la marabunta que huía de los infectados, con solo 15 años.los dos perdimos muchas cosas durante esos días así que entiendo perfectamente lo que el debió de haber pasado, Rafael su cara ya tiene los años encima, ese hombre ya a de rebasar los 45. A pesar de su gran condición física, no quisiera sobreexplotarlo, tampoco quiero saber por quien llora, eso me da muy mala espina.
Jacob tampoco se me escapa, saber que el fue el que causo que perdiera a mi familia, hace que quiera matarlo, pero yo nunca he sido del tipo de persona que toma la justicia por su propia mano, si muere aquí, en las manos de sus propias creaciones, seria la ironía mas grande, pero todos mueren, no tiene caso su muerte, lo mantendré vivo, haré que observe los horrores que el creó. Un tipo como el no es fácil de encontrar, un cerebrito en muy buena forma, lo vi escalar arboles para alcanzarlos, levantarse de madrugada inclusive defenderse cuerpo a cuerpo de un infectado, ese tipo no es un juego, es peligroso y lo se no solo mentalmente, sino que físicamente, logra mantener muy bien la compostura, si no fuera por que el técnicamente mato a 5.2 millones de personas, seria un gran compañero de guerra”.

Se acercaban a las salida de esa selvática región, los enormes arboles fruteros fueron sustituidos por uno que otro arbusto en el camino, las enormes malezas fueron sustituidas por un césped crecido sin control, pero que aun así no rebasaba los treinta centímetros, creando unas largas y enormes praderas, hace mucho que ellos no lograban encontrar un buen lugar para dormir, acampaban en las copas de los arboles ante el riesgo de ser captados por “el hombre verde”, pero ahora prácticamente como un regalo de dios, se erigía esa enorme casa, amurallada por unas enormes paredes de piedra, y con una cerca de alambre de púas, puertas de acero enormes, que no sucumbieron ante las enormes hordas de infectados, los enormes carteles de: “supervivientes aquí” delataba, que este fue uno de los últimos lugares que se levantaron para resistir.
Los tres hombres se acercaron al enorme portón de acero que aparentaba ser del periodo barroco, y lo abrieron simplemente al darle la vuelta al picaporte, desenredaron la cadena y entraron. Rafael entró a la casa, pero Micheal y Jacob se quedaron cerrando el enorme portón por el que habían entrado, Micheal se sumergía en sus recuerdos de la niñez, había crecido en una casa mas o menos similar a la que ahora se encontraba; recordó la primera noche en que surgió el mas grande ejercito que había nacido en la tierra, sus vecinos, rogaban por guarecerse con el y su familia, su padre, un hombre integro, que siempre le había enseñado el bien a su hijo, los dejaba pasar, la comida que su familia había almacenado para meses, se agoto en días. En ese momento, toda la gente abandono el refugio y se dirigió en busca de la ayuda del ejército, el peregrinaje fue largo y cuando dieron con ellos, su alegría no duro mucho.

Un grito termino con la melancolía de Micheal, acto seguido Rafael salió de la casa, mientras un hombre barbudo lo encañonaba con una vieja escopeta de caza.
Era una situación difícil, el juicio de Micheal estaba completamente desconcertado, no se sabía nada acerca de supervivientes en la superficie de la tierra. La primera reacción del hombre fue apuntarles con su arma, pero en una acción de arrepentimiento, dejo caer el arma en el suelo, y sin quitarles un solo ojo de encima camino lentamente hacia ellos y dijo.-Mi nombre es Roberto, hace ya un tiempo, que no veía seres humanos. ¿Si no les molesta la pregunta, como han logrado sobrevivir?
Micheal, estiro el brazo para saludar al singular hombre, pero ante la negativa del mismo la retiro y dijo.- Soy el teniente Micheal Fant, el es Jacob, y usted ya debe conocer al biólogo Rafael. Y con respecto a su pregunta créalo o no, no llevamos mas de tres semanas, en este lugar. Con respecto a usted, Roberto, ¿vive aquí solo?
El robusto hombre de complexión amplia, se acariciaba la barba, tratando de encontrar las palabras que describieran la odisea que había vivido durante el tiempo que había sobrevivido, hasta que dijo.- No estuve solo, esta casa es enorme, con un amplio jardín trasero lleno de hortalizas, hace casi seis meses, los “madera quemada” se empezaron a llevar a los niños, y a las mujeres hasta que solo quedamos nosotros.
Extrañado el teniente Fant le preguntó, señor exactamente quienes son los “madera quemada”.
Roberto lo miro con cierta curiosidad y dijo: Hombre, ha sobrevivido tanto tiempo y nunca se ha topado con ellos, no se si usted les dirá así, pero con tan solo verlos se dará cuenta de por que los llamo así.
La noche se acercaba cada vez más, y Roberto sabia de buena fe acerca de los peligros que acechaban aquella zona durante aquellas interminables noches. Así que este como todo buen anfitrión los invito a pasar a aquella casa de antaño.
La noche transcurrió con aquellos tres hombres maravillados escuchando las historias de supervivencia, de aquel fornido hombre. Hasta que se acercaron a la pregunta de oro.
¿Acaso había más supervivientes? El barbón los observo por unos segundos y les dijo.- Si los hay, desperdigados por todo el globo, solos o en grupos, han encontrado un refugio ideal y una buena fuente de alimento; también están esas sectas que se formaron después de que el ultimo transbordador fuera lanzado hacia la salvación dejándonos aquí a nuestra suerte.
Jacob mostró la sonrisa más pura y dura de un psicópata y dijo.- Mi querido amigo, si le hubieran llevado allá créame que no le gustaría, tan serio y gris, tantos controles sanitarios, después de lo que paso con el DEFCON 1…
Roberto interrumpió al convicto y dijo.- Señor, ¿que sucedió con el DEFCON 1?
Con una sonrisa extraña Jacob termino la frase.- Amigo, se desperdigo nuevamente, el virus, pero por lo que oí en el cuartel de la L.R.C.D.G , la cepa es mucho peor, ya no muta, genera un estado primitivo de inteligencia, al punto que continuamente se vuelven mas inteligentes, poco después me condenaron a morir en la tierra.

Las puertas de acero de la entrada del caserón retumbaban en esos instantes, mientras furiosos gruñidos emanaban del exterior del portón. Y una nauseabunda esencia corrupta empezaba a aparecer en la habitación acompañado, por un sutil olor a humo. Sin embargo no era nada de eso, en el exterior; extraños seres se percataban de la llegada de su nuevo alimento.
Y entre los gruñidos, gemidos y toda la gama de sonidos que se escucharon, Rafael pasaba la peor noche de su vida. Los golpes al portón, los gruñidos y gemidos, sacaban a la luz, los tormentos que esta desafortunada alma había vivido durante “la caída”.
Aquella pesadilla era tan vivida, qué para el era el presente.
Estaba en un pequeño apartamento, con sus dos hijas aterrorizadas ante las imágenes que veían por el televisor, y el hipnotizado por el espectáculo que se desarrollaba abajo del balcón donde se encontraba.
Sus perturbados ojos miraban como a solo 3 metros debajo de el un hombre era devorado vivo. Los ojos de aquel sujeto empezaban a perderse, sus pupilas se dilataban mientras poco a poco, caía inconsciente debido a la enorme perdida de sangre. Rafael no pudo seguir observando aquella aberrante escena y ingreso de nuevo al interior del apartamento; con una mirada desganada se sentó en la esquina de su cama, sus ojos mostraban la tristeza y esperanza muerta que lo inundaban.
Aquel hombre era consciente de que jamás podría llevar a sus hijas a un lugar seguro el solo, que solo era cuestión de tiempo, para que se le acabara el suministro de agua y se agotara la poca comida que disponían. Pero paso poco tiempo para que la ayuda llegara, una pequeña cuadrilla de soldados pasaba por delante de su edificio, no podía malgastar la oportunidad, tomo a su hija menor de cuatro años y salto con ella, del balcón, seguido de su hija mayor de dieciséis, emocionado Rafael corrió hacia los soldados, que no muy convencidos accedieron a ayudarlos.
Pero a los pocos días, los soldados empezaron a acosar a la joven de dieciséis, y una mañana, Rafael despertó solo, sus hijas habían sido secuestradas por los militares, sin expresión alguno camino sin rumbo fijo sin importarle el peligro que corriera, hasta llegar a un altísimo puente, aquella vista desencadeno el frenesí de emociones reprimidas de Rafael, gritaba a los cuatro vientos su dolor, el amor a sus hijas, e inclusive el creyó ver lo que había pasado, su pequeña llorando por el mientras era arrastrada por los militares, lloro sin consuelo hasta quedar dormido, pero aun así no dejo de llorar.

Mientras todo el mundo descansaba en la habitación principal de la planta baja, Jacob decidió ir a echar un vistazo a la parte de arriba, subió las escaleras con tranquilidad, al llegar al final de ellas, se encontró frente a un pasillo con 4 habitaciones. Este hombre de naturaleza curiosa no se interés en ellos, camino al final del pasillo donde una puerta de vidrio, daba hacia un balcón. La respiración de Jacob se iba agitando, con la excitación de observar a las creaturas que se movían en la oscuridad.
Se recargo en el viejo y oxidado barandal, y los contemplo; seres de color palido, que brillaban bajo la luz de la luna, sin ojos, su forma humanoide era increíble; su cara había desaparecido, y fue remplazada por una enorme boca llena de filosos y enormes diente, con garras tan filosas que cuanto se rozaban entre ellos infringían cortes. Al parecer, su espalda era ancha y sus costillas habían sido separadas. Caminaban con tanta confianza como si realmente pudieran ver, sin ojos, sin oídos, sin nariz. Un verdadero misterio que supieran a donde trasladarse o donde se encontraba su presa.
En la lejanía, un pequeño siervo corría, bajo la luna, no tomo mas de 3 segundos para que la marabunta de monstruos, estuviera sobre el, consumiendo al siervo de una sola mordida. Increíbles y peligrosos seres.
Roberto tiene sus razones para temerles.- dijo el doctor para si mismo.
No son ellos a los que temo, de hecho ellos no son problema, solo salen de noche y de día están en sus cuevas además es muy fácil evitarlos. Mi hija los llamaba “Luna creciente”, sabrá la respuesta, su espalda parece, esa fase de la luna. “Los madera quemada”, son algo completamente distinto, fuertes, rápidos y mortales, su piel se le ha carbonizado mientras viajaba por los desiertos, en la noche la negrura de su piel y lo esquelético de su cuerpo lo asemejaban a un árbol facilitándole la cacería, cuando se acabaron los animales solitarios, ya se habían encontrado muchos de esos seres y se convirtieron en manadas. Y al pasar del tiempo aprendieron lo útil que es usar piedras y ramas contra los animales y contra el hombre. Afortunadamente sus extremidades se rompen con facilidad, ante golpes acertados correctamente. Aun así no es recomendable un hombre que nos acompañaba, murió cuando un “Madera quemada” con el brazo roto y el hueso astillado, se lo clavo por la espalda. Y fue devorado poco después por el montón de esas cosas.
No se a donde vallan, pero yo me ire, a algún lugar ya no soporto el estar encerrado.

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Mensaje  Battousai Dom Ene 24, 2010 5:20 pm

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