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Una tarde como cualquier otra cuatro jóvenes paseaban por una plazoleta charlando y riendo,
-Che y si nos vamos de vacaciones a algun lugar tranquilo?
-Estaría bueno, dale vamos!
-Si unos días no le hace mal a nadie
-Vamos no mas!
Y así Lucas, Lucia, Mariano y Tomas empezaron a hacer planes de sus minis vacaciones; ellos cuatro eran unos adolescentes de 17 años, que Vivian en una ciudad muy concurrida. Lucas y Lucia salían ya de ase meses y entre los cuatro se llevaban muy bien y así Iván a disfrutar sus vacaciones.
En el camino a Sierra de la Ventana los chicos charlaban y planeaban las actividades que Iván a realizar al llegar, además que se alojarían en un camping muy cerca del arrollo.
-Si (gritaron al llegar)
-Lucas ve a pagar una semana por adelantado al dueño del camping(Dijo Lucia)
-Bueno bueno espera que nos acomodemos.
Transcurrido una hora y media los chicos ya estaban con el campamento armado y con las mochilas listas para la actividad de ese día, que era bajar al arrollo a charlar y quizás pescar, además de que llevaban mate y sándwiches.
-Mira que ricos sándwiches prepare (una vez en el arrollo).
-Ummm que rico comamos pues.
-Tomas grita miren eso, alguien del otro lado del arrollo.
-O tiene sangre y laceraciones por todo el rostro.
-Hay que pedir ayuda.
Y así concluye la primera parte, el principio del fin…

Ellos llamaron a emergencia y se largaron a comer a otro lado, pero lo que ellos no savia aun es que el “hombre” no estaba lastimado y nada mas sino que el estaba infectado por un gran virus que en cuestión de semanas se transformaría en una gran epidemia. Ya de noche ellos mantenían una conversación:

-Que limpios que están los baños de el camping
-Si, viste, yo de paso me di una duchita
-Ja ja ja no te venia mal
-Je je je por que lo decís si ni estaba traspirado
Mientras Tomas miraba fijo al fuego y no decía ni una palabra.
-Que fue lo de hoy? Dijo Tomas
-Nose fue raro por que el no nos hablo en ningún momento
-Si es verdad, me voy a dormir.

Al día siguiente los chicos fueron a escalar unos cerros bajitos y al llegar se encontraron con otra situación desagradable; una mujer estaba tirada en el piso convulsionando. Lucas le pregunto a una de las enfermeras que le avía sucedido y ella contesto que una media hora antes había estado delirando, diciendo que la había mordido un maldito ebrio. Ellos siguieron con lo suyo y lo ignoraron; al llegar a la cima de unos de los cerros, se pusieron a tomar mate y descansar, e hicieron esto por toda la tarde asta que se cansaron y volvieron al camping.
Al llegar se acostaron, después de comer unos ricos choripanes.
Mariano pensaba lo sucedido en ese día, mientras Lucia y Lucas disfrutan teniendo sexo en la carpa de al dado.
-Tomas no molestes, dijo Mariano recostado en la colchoneta y Tomas le respondió (desde la carpa de al dado)
-No como voy a ser yo si, estoy tratando de leer o eso intento, ya que los chicos con sus gemidos me distraen y me llevan a otros pensamientos, jajaja rió el al terminar la frase.
-Y entonces quien es, dijo Mariano
-Tomas agarro el arma (un revolver cal 44) y salio de la carpa.

En ese momento a Tomas se le cruzaron miles cosas al ver un hombre golpeando la carpa de Mariano.

-Señor que le suceded o en que lo puedo ayudar?
-Tomas grito del susto al ver la cara del “sujeto” (con múltiples laceraciones y sangre, de nuevo)

El corrió al ver el sujeto lo corría gimiendo y gritando y decidió dispararle en el pie, pero sin querer se cayo torpemente y como seguía arrastrando y moviendo, sin hablar y decir nada Asia el. Así que el se vio obligado a jalar el gatillo de el 44 y matar casi instantáneamente al sujeto.
En ese momento todos salieron de las carpas, Lucia y Lucas semidesnudos se abrasaban y Tomas y Mariano estaban paralizados. Tuvieron que ir a la comisaría de Sierra y declarar lo sucedido y luego de ver sus expedientes, los largaron.